Maestro
Mi amigo Nacho
Celaya ha escrito un comentario en Facebook que me ha emocionado. No sabía
si copiarlo todo o sólo una parte. Voy a compartir una parte después de un
comentario personal.
Ser maestro significa para mi convertirme en compañero de
viaje, guía sin estorbar, sin gritar, sin cerrar posibilidades sino abriendo
caminos, mostrando señales, descubriendo juntos maneras de interpretar y
discernir encrucijadas… llenando juntos mochilas (de ellos y la mía) para
travesías maravillosas o caminos tortuosos… Todo ello como respuesta a una
llamada clara a darse, a vivir con intensidad el ser para el otro, el servir y
no servirse… Detrás de la reflexión de Nacho uno descubre que debe centrar bien
la mirilla (donde mirar para acertar en la tarea) de nuestro hacer de cada día…
mirar menos mi horario, mi tiempo, mi asignatura, mi currículo, mi mi… ,
incluso diría la ley, y ver delante de nosotros al alumno, a su familia, al
adolescente que busca entender, comprenderse, que se enfrenta a todo y a todos
para encontrarse, al niño que se deja hacer y por lo tanto tenemos que
acariciar y proponer para convertirlo en protagonista de su vida, de su
aprendizaje, de su ser…
Destacaría una palabra para esta tarea, vocación, profesión,
misión que es educar, es la pasión. Hacer las cosas con pasión supone entrega,
respetar al otro que conmigo vive lo que me apasiona, desgaste, miradas de complicidad,
detalles, generosidad, aprovechamiento de tiempos, espacios y momentos,
caricias y no rupturas o desencuentros, deseos de profundidad, verdad y
coherencia, proyecto y procesos diversos, dejar nimiedades, ver más allá de lo
superficial, perdida de miedos… Vivir de esta manera la tarea educativa la
convierte en encuentro apasionado entre el que busca y el que se da, el que está
perdido y el que guía, el que es único e irrepetible y el que se lo hace
descubrir… Vivir apasionadamente se transmite por el brillo de los ojos, las
palabras cargadas de profundidad, los gestos de amabilidad, la tensión
suficiente para no perder detalle de lo que se va a vivir, el latir más rápido
de un corazón que siente de otra manera, los detalles cargados del amor
inconfesable o la autoridad bien explicada y respetada.
Vamos a comenzar un nuevo curso y no puede faltarnos la
pasión… Deseo una buena dosis de ella para todos los compañeros de vocación…
Vivir… y vivir en plenitud en esa edad adolescente… y ser feliz
y planificar un futuro digno, es una tarea enormemente compleja…
Por eso… lo importante de la educación reglada, de nuestra
tarea… tiene mucho mas que ver con lo que nos entregamos, con el testimonio,
con la pasión, con “el cómo” enseñamos… que con “el qué” podemos enseñar en
clase a nuestros alumnos/as…
Porque lo esencial de la educación no es trasmitir
conocimientos… Lo que necesitan los chavales es que les ayudemos a construir su
identidad, a encontrarse, a entenderse, a quererse, a crecer… ayudarles a
resolver problemas, a pensar, a superar las derrotas, a crecer como ciudadanos…
todo, desde el curriculum y las horas de las asignaturas que seamos expertos…
Es cierto que un buen profesor de física o de latín, te enseña a
amar la asignatura… Pero el chaval que es bueno, lo será contigo o contra ti…
Vivimos unos tiempos donde el conocimiento está al alcance de casi todos/as y
sin duda lo adquirirán cuando lo necesiten…
… La inserción en los barrios o pueblos, el que sepan que nos
importan, que les queremos… Si, todo eso debería estar recogido en el curriculum
oculto, más allá de las oposiciones de un buen maestro/a…
… Ojalá que nunca pierdas las ganas de empezar con pasión un
nuevo curso, ojalá aprendas a pedir más perdón y menos permiso, ojalá empeñes
tu tiempo en la escuela a la creatividad, a la locura, a la pasión y al
esfuerzo, al descubrir la vida y sus retos…
Ojalá siga apasionándote cada persona, cada chaval, cada sueño…
ojalá seas capaz de tomar conciencia de lo difícil que es vivir… Ojalá puedas
seguir queriendo a los alumnos/as…
Ojalá nunca dejes de ser MAESTRO
Ojalá…del árabe لو شاء الله , law sha'a Allah; «si Dios quisiera»
Comentarios