Entradas

Mostrando entradas de marzo, 2009

Hágase

Imagen
Una de las cosas que en nuestra vida de creyentes oímos una y otra vez es que la oración debe hacerse vida. También es fácil escuchar que la vida sea oración. He buscado durante mucho tiempo un testimonio de esto, no estaba siendo fácil, en alguna ocasión oía la trompeta que anunciaba el acontecimiento de esta coincidencia de oración y vida, me acercaba y veía que eran pequeños atisbos de una verdad deseada y realizable. Seguía buscando, esperando y deseando encontrarme con la realidad que manifestara la contemplación de Dios, en el rostro de alguien con el que me encontraba o en mi propia vida. Era un deseo mil veces expresado en mis oraciones. Si algún día pasa, pensaba para mí, tiene que ser un regalo de Dios, no puede ser algo que yo pueda conseguir por mis fuerzas. Hoy puedo decir que el testimonio de un hermano me ha ayudado a descubrir que se puede hacer de la vida, del proyecto de vida, una oración que retumbe más allá de la muerte y del dolor. He visto con mis ojos, he sentid

Dolor

Imagen
El dolor es parte de nuestra vida. ¿Se puede vivir sin dolor? ¿Se puede vivir con dolor? He visto el dolor y tenía forma de lágrima. A los pocos segundos se convirtió en sonrisa. ¿Dónde se fue? ¿Por qué vino? ¿Cómo lo evitamos? ¿La morfina? ‘El mejor antídoto contra el dolor sois vosotros, las visitas’ Viene sin buscarlo. Un accidente. Una enfermedad, un mal trago… una sorpresa. Ahí está. El dolor aparece. Uno se retuerce de dolor. Las entrañas se mueven, el cimiento se resquebraja. ‘Un pinchazo que llega sin llamar y te mueve toda entera…’ ‘Me muero, me muero…de dolor’ ¿Es un deseo o una sensación? Ojala se pudiese morir de dolor cuando llega, para no sentir. No es verdad, sigues ahí, sufriendo, mordiendo, llorando. Sigue mordiendo las entrañas, quieres irte o que se vaya. Nada de eso sucede. El dolor tiene movimiento. Un movimiento de dentro a fuera. Es exponencial: va creciendo sin que lo puedas parar. Te hace retorcerte como una culebra. De abajo arriba o de arriba abajo. No sabes