RUEDA DE MOLINO

  La vida tiene el mejor guionista y lo quiere escribir contigo.  Confía.  Deja que Él te guíe.  Es un guión complicado de entender por nosotros, somos capaces de modificarlo, propone más que dirige, sugiere y escucha tus susurros y respeta tus miradas... Me encanta vivir ese guión. ¿Te apuntas? Con su mano solo puede ser un guión de felicidad. 

  Llevamos dos semanas con alumnos. Tengo pocas clases, he intentado entrar a clase con una sonrisa, aprender sus nombres, reír con ellos, hacer una prueba inicial, mirarnos a los ojos, respetar sus propuestas, pedir comprensión, escucharles... Han cambiado muchas cosas. Llevamos mascarilla, estamos en fila de uno, se han terminado los grupos, las parejas... Hemos retrocedido en el cambio del método de enseñanza aprendizaje, por lo menos en las formas... por los menos en el contacto y la manipulación de las cosas... Creo que no podemos renunciar a ello, hay que buscar la manera de seguir proponiendo y haciendo. Creo que es posible con creatividad, con nuevas propuestas... Pero hay algo que no ha cambiado. Hay algo que no se ha suprimido y que ni el gel borra o elimina. El cariño, la manera de mirarles a los ojos y decirles que son maravillosos, únicos y valiosos, que son los verdaderos y auténticos protagonistas del colegio... Y puedo afirmar que cuando se da el cariño, donde se da el

Que se acaben los grises. Que desaparezcan los agoreros Que terminen las tormentas y los miedos Que en los túneles veamos el final. Que salga el arcoíris Que se enciendan las luces.  Pintemos...  Pintemos el futuro de verde, que florezca la esperanza. Que no falte el rojo apasionado de un encuentro. El azul de un horizonte posible y abierto resplandezca. La Luz potente de un amarillo brillante nos haga despertar. El marrón de la tierra sazonada y cargada de semillas nos dé estabilidad. El violeta nos recuerde de dónde venimos y aquellas caricias que nos hacen sentir únicos....  Pon tu color... el otro te lo agradecerá.  Un abrazo