Cambios
En tiempos de crisis pocas mudanzas, eso parece que decía la Santa Carmelita , Teresa de
Jesús. No es mala postura, una sabia propuesta de la Doctora de la Iglesia. La verdad es que en
tiempo de crisis, de tormentas, de oscuridad… moverse puede hacer inmenso todo
aquello que supone el cambio y el movimiento.
Estamos
en tiempos de crisis y de cambio. ¿Qué es lo primero? ¿Hacemos caso a la Santa a los signos de los
tiempos? ¿Qué es la tranquilidad para superarla, o el cambio para que se mueva
algo y cambie? ¿El huevo o la gallina?... Yo no tengo dudas. Hay que cambiar.
Hay que moverse. Debemos salir a la calle, romper nuestras ataduras de una vez,
hay que dejar todo y decir ‘aquí estoy
haz de mi lo que quieras’. Recemos y recemos el Padre nuestro, ‘hágase tu voluntad’… no puede ser tanta
quietud. No es quietud, es poltrona. No es edad es comodidad. No es imposible
es sin ganas. No es ser imprescindible es 'yoyismo'.
La crisis no es exterior, no es de fuera… La crisis es de
instalación, de estructura, de apegos, de falta de disponibilidad. ¡¡Me río yo
de aquellos maestros que hablaban y escribían de disponibilidad!! ¿Dónde están
ahora? ¿Por qué no salen ahora a explicarlo?
Nos estamos perdiendo muchas muchas cosas…, momentos,
experiencias, novedades, propuestas… que no volverán, que nos harían envejecer
creciendo y no como lo estamos haciendo ahora, envejecer menguando.
Creo que la crisis es de falta de conversión, para
salir a las plazas, para salir a las periferias, para vivir con austeridad,
para vivir en la intemperie de la vida, para vivir con lo justo… Este
desaprender, este desarraigo de lo que no es propio nuestro, será el principio
de algo nuevo. Todo lo propuesto, lo intentado, lo vivido, lo deseado, lo
programado, lo planificado… debe partir de un ponernos a disposición del Señor
y de la voluntad de Dios, de lo que los nuevos tiempos y las nuevas estructuras
de organización nos piden. Eso se expresa solo de una manera: Señor, haz de mi lo que quieras... ponerse a disposición de la comunidad, es decir, del Superior... El que no quiera, que siga sirviendo a ese otro señor al que sigue, pero en otro lugar.
Estamos dejando pasar una ocasión de oro… no tenemos tiempo
que perder…
‘Sal de tu tierra…haré
de ti una gran familia’
Comentarios
Seamos cada uno de nosotros los primeros en dar los pasos hacía cumplir la voluntad de Dios...
¡Si tenemos que esperar a que el otro se comprometa... nos aburririamos por el camino! ¡Que paciencia! Comencemos en dar nuestra propia vida, lo demás ya llegará... Pidámosle a Dios, cada día, por la conversión del hermano...
Una vez oí a alguien decir que una manera de discernir era elegir LO MÁS EVÁNGELICO POSIBLE. Tiene que ser evángélico, posible y las dos cosas lo más. No es fácil pero es un criterio. A veces lo más posible no es evangélico o lo más evangélico no es posible. Creo en este criterio y lo suelo aplicar en mi vida. No cambia nada... terminas muriendo poco a poco por el otro... esto si es posible y evangélico.
Sigo pensando, como en el pequeño apunte, que la clave está en la desinstalación, romper falsas raíces y salir de tierras prometidas falsas donde nos atrevemos a considerarnos 'mesías' o guías de ellas...
Gracias hermanos.