Ser carmelita

El carmelita recibe y comparte con los hermanos un único carisma común: 'vivir en obsequio de Jesucristo' en actitud contemplativa, que plasma y sostiene nuestra vida de oración, de fraternidad y de servicio (RIVC 4) El 16 de julio se llena nuestro patio de muchos amigos, conocidos, cofrades, terciarios, jóvenes carmelitas, alumnos y alumnas, antiguos seminaristas, exalumnos y exalumnas, algún religioso, autoridades, personas que vienen a celebrar la fe, a escuchar el Evangelio, a dar gracias a la Virgen María o a pedir su ayuda y compañía. Unas y otras son personas con profunda fe que quieren abrir el corazón a Dios y saben que María les ayuda a ello, es puerta que se abre para que así sea, esto les llena de confianza para que lo hagan con verdad… Todos son carmelitas de deseo, de sentimiento, de compromiso, de proyecto de vida, todos.. Cada uno tiene un lugar y una manera de estar en la Familia Carmelita. El día 16 de julio es su día, nuestro día, el día de toda la Familia ...