Retomar
Fui a visitar unos molinos. Muy
diferentes al que provocó este blog. El nombre lo elegí del oficio
de mi abuelo, de la masía donde nació él y mi madre, de la manera
como un amigo, ya fallecido, llamaba a mi mamá: molinera. De ese
caserón olvidado y viejo, lleno de humedad y telarañas hay algo que
no nota el paso del tiempo, es la piedra en forma de rueda que giraba
y giraba para moler el trigo. Visitar esos molinos, en otro lugar del
mundo, me ha llevado a asumir el compromiso de retomar este blog. Lo
tengo olvidado, lo tengo casi cerrado, últimamente lo utilizaba para
guardar alguna cosa que escribía y que así no perdía.
Me gustaría ser perseverante y que
mucho de lo que ocupa mi vida pasara como reflexión en él. Metido
en muchas cosas aprieto poco en todas ellas, pero de aquí y de allá
siempre tengo cosas para compartir después de haberle dado unas
vueltas y haber intentado hacer un poco de harina. Un alumno, un
versículo, una opinión, una propuesta para o de mi Iglesia querida,
una brasa encendida y llameante de la vida religiosa u otra que se
apaga. Palabra, jóvenes, Evangelio, educación, proyecto de vida,
cooperación, vida cotidiana… deseo volver a publicar y que formen
parte de esta humilde ventana que no quiero que cierre la cortina
para oscurecer un poco más mi vida. No me considero maestro de nada
ni de nadie… solo uno es 'Rabí'. Ni sé escribir bien, pero me
gusta utilizar las nuevas tecnologías para compartir lo que soy,
siento vivo y hago.
Comentarios
Me sirve para mí, para compartir con mis alumnos/as. mis amigos/as...
Gracias.
Mar